Su "Centro cultural y auditorio del Kursaal" en San Sebastián, descrito por Moneo como un elemento mediador entre lo natural y lo abstracto, en la línea del pensamiento oteiciano, despertó el interés de la crítica; por el giro que suponía en el trabajo del arquitecto navarro. Una obra conflictiva que supuso numerosas críticas al arquitecto, un error provocó el derrumbamiento durante la obra de la gran escalera del edificio principal (afortunadamente sin víctimas). Se ha convertido, una vez finalizada, en un icono de la ciudad.
El arquitecto, diseñó dos cubos de vidrio translúcido como "dos rocas varadas" en un intento por "perpetuar la geografía y, en la medida de lo posible, subrayar la armonía entre lo natural y lo artificial".
El edificio ha sido distinguido con el Premio de Arquitectura Contemporánea Mies van der Rohe, el más importante de los concedidos en Europa, por “el carácter excepcional” del proyecto y su “innovación conceptual, estética, técnica y constructiva”.
Fuente:
- http://www.artehistoria.jcyl.es/histesp/monumentos/544.htm